El Ejecutivo dispuso que las provincias de Trujillo y Pacasmayo pasen a un nivel de alerta alto por el aumento de casos COVID-19.
Ante ello, se aplicarán medidas y restricciones, que se acatarán desde el 7 de enero, con el fin de evitar la propagación masiva del virus. En el caso del toque de queda, se dispuso que el nuevo horario sea de 11.00 p. m. a 4:00 p. m. Esta disposición se aplicará hasta el 16 de enero.
Anteriormente, en La Libertad, se había designado que las provincias de Virú y Chepén estén en un nivel de alerta alto.
Entre las nuevas acciones está la reducción de aforo de restaurantes al 50%, mientras que los centros comerciales solo podrán atender al 40% de su capacidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Déjanos tu opinión sobre el tema